Con la creciente demanda por parte de los consumidores de alimentos más seguros y naturales, se ha fomentado el interés por incorporar antioxidantes naturales a la carne a través de la dieta animal, para mejorar las características productivas de los animales. El romero (Rosmarinus oficinalis L.) es un pequeño arbusto de hoja perenne que pertenece al género Salvia en la familia Lamiaceae originaria de Europa, el norte de África y la costa mediterránea. Las hojas de la hierba tienen un uso prolongado en los sistemas tradicionales para la medicina y la culinaria. Los extractos de romero se utilizan para dar sabor y como una alternativa natural a los antioxidantes sintéticos en los alimentos.

Los principales ingredientes activos del romero incluyen: carnosol, ácido carnoico, romero, ácido ursólico, ácido oleanólico, ácido rosmarínico y componentes α-terpineol del aceite esencial de romero. Los diterpenos ácido carnósico y su derivado, la lactona carnosol, son componentes presentes en la fracción polifenólica liposoluble de la hoja de romero, la de mayor capacidad antioxidante. Se ha utilizado como aditivo para alimentos durante más de veinte años y para alimentos para animales ha sido aprobado por la Asociación Estadounidense de Funcionarios de Control de Alimentos. Como nuevo aditivo alimentario funcional, el extracto de romero tiene los siguientes beneficios:

  • Propiedades antimicrobianas y antioxidantes;
  • Fuerte reducción de la oxidación de lípidos;
  • Mejorar la calidad de la carne y reducción considerable de la carga microbiológica total;
  • Optimizar la flora intestinal y reducir el uso de VE;
  • Promover el sistema inmunitario y el crecimiento.

Aceite de romero

El extracto de romero para la alimentación animal puede mejorar la calidad y la seguridad de la carne. Los investigadores han informado sobre las propiedades antimicrobianas y antioxidantes del romero como aditivo para la alimentación animal. La suplementación de la dieta animal con extracto de romero en las condiciones indicadas aporta cantidades adecuadas de ácido carnósico y carnosol para aumentar la capacidad de conservación de la carne. Se realizó un estudio para evaluar el efecto del romero como aditivo sobre las propiedades antimicrobianas y antioxidantes de la carne. La actividad antimicrobiana se evaluó midiendo los recuentos microbiológicos en los días 7 y 21 de almacenamiento. El recuento microbiológico se redujo en el grupo alimentado con romero, mientras que no se vio afectado en el grupo de control.

La concentración de extracto a agregar a la alimentación debe estar en el rango de 2700 a 4000 ppm, para lograr una efectividad adecuada. En estas condiciones, la concentración mínima de la suma de los dos principios activos presentes en el pienso está entre 600-900 ppm. La dieta de los corderos durante la etapa de engorde debe complementarse con una cantidad de extracto de romero que aporte un total de 640-980 mg de diterpenos (ácido carnósico y carnosol a partes iguales) por kg de pienso de engorde. La importancia de la relación entre la concentración de ácido carnósico y carnosol en el extracto de romero a añadir a la alimentación animal es fundamental para asegurar la correcta biodisponibilidad de ambos componentes y así asegurar la mejora efectiva de la calidad y vida útil de la carne.

El extracto de romero se utilizó para la alimentación animal debido a sus excelentes propiedades antimicrobianas y antioxidantes. Los animales alimentados con romero tenían niveles más bajos de bacterias y bacterias del ácido láctico. Puede inhibir el crecimiento de mesófilos, levaduras y mohos, como las bacterias psicrófilas y las bacterias del ácido láctico. Su actividad antioxidante se atribuye a los compuestos polifenólicos presentes en la planta del romero. Se ha descubierto que el aceite esencial de romero inhibe el desarrollo microbiano y puede mejorar la jugosidad de la carne de cordero. Además, se ha demostrado que el extracto de hoja de romero protege contra el daño oxidativo del ADN y la hepatotoxicidad inducida por tetracloruro en ratones.